Es un bruñido espejo que se rompe
abriendo un paréntesis al enigma
con terca luz que te ciega irrumpe,
que tajea sobre tu alma nuevo estigma.
¿Así puede declararse la vida
o al contrario este inciso, es la muerte
y la zona entre oscuridad perdida
es la meta hasta volver a verte?
Con titubeos empiezas los trazos
que dibujan tu propia cartografía
tu aliento consumes con tus pasos;
vas dando ritmo a tu coreografía
manteniendo armonía con tus brazos.
La emoción marcará las pautas, confía!
©Marvilla
Barcelona,12 de julio 2014
Te encuentro y me lanzas tu impresión
acerca de esta metáfora
que es mi cuerpo ánfora,
cambiante, mutante en intensa rebelión.
Y esos tus ojos, se posan en tus ojos
y me miran muy adentro
y ves un pozo de silencio
donde se oyen, revolverse los miedos.
Hoy, que no te gusta lo que mis ojos ven
no te quiero de testigo,
te odio por estar conmigo,
y que veas tus gestos muertos que nacen.
No eres nada más que el tosco espejismo
de cada mañana, helado.
Me miras y eres malsano
yendo derecho a mis entrañas con lirismos.
No aceptas tu cara en tal torva mirada.
No veo a ese que enseñas;
veo lo que tú no sospechas,
reflejo de espurias esperanzas de plata.
¡Dadme por compasión espejos de almas!
Que salven de naufragios,
con píos reflejos solidarios,
que arropen mi ser con sones de guitarras
componiendo idílicos paisajes
para acallar los hoscos vendavales
traidores, resoplando broncos a mis espaldas.
©Marvilla
Barcelona,20 de setiembre 2015